Las militantes Montserrat Carulla, del grupo Manresa de la diócesis de Vic y Montse Forcadell, del grupo Andantino de la zona Besòs, han aceptado ser candidatas a presidenta de ACO y, por tanto, concurrirán ambas a la elección que se hará en el Consejo Extraordinario del próximo 12 de octubre, coincidiendo con la Jornada General del movimiento. La noticia la comunicó el presidente de ACO, Jordi Soriano, a los responsables del movimiento en el último Comité General de este curso que se celebró el sábado 14 de junio.
Como se recordará, las nuevas Normas de funcionamiento y organización de ACO han motivado un cambio en el procedimiento de presentación de candidaturas, partiendo esta iniciativa de las zonas y diócesis que han propuesto posibles candidatas a realizar este servicio. Los copresidentes actuales y el consiliario general se han ido poniendo en contacto con 14 posibles candidatas explicando el origen de la solicitud y pidiendo que hicieran la Revisión de Vida sobre la responsabilidad en su grupo para discernir. Finalmente, dos Montserrats, Carulla y Forcadell, han decidido dar este paso y próximamente las conoceremos mejor por medio de una presentación escrita de cada una.
«Todos los que tenemos una responsabilidad ofrecemos los talentos recibidos al servicio del bien común. Este es el núcleo de lo que debemos transmitir a la hora de hacer los relevos», dijo Rocío Elvira, la presidenta que este curso finaliza su servicio y que agradeció a los responsables de zona, diócesis y comisiones «su compromiso, dedicación y esperanza». En la reunión las zonas hicieron un repaso por cómo había ido el curso y se destacaron algunos aspectos:
- algunos Estudios de Evangelio y Revisiones de Vida del Plan de Curso se han utilizado para acercarse a familias de niños que hacían catequesis, para organizar alguna jornada de formación o para reunirse dos grupos y trabajarlo conjuntamente;
- se han potenciado momentos celebrativos (Adviento, Navidad, Cuaresma, Pentecostés…) con otros movimientos de Acción Católica y de la Pastoral Obrera;
- la Revisión de Vida sobre los sacramentos, especialmente la Eucaristía, ha sido muy apreciada;
- la Revisión de Vida sobre la responsabilidad ha servido para ir preparando los relevos en alguna zona;
- en varias ocasiones la propia dinámica vital y de los grupos impide incorporar el trabajo propuesto en el Plan de Curso, aunque se valora que es una guía adecuada para caminar con coherencia grupos, zona y movimiento;
- se ha aprovechado para contactar con colectivos vulnerables e ir pensando en cuál podría ser la acción conjunta profética a realizar el próximo curso.
Las diferentes zonas y diócesis también compartieron los encuentros y asambleas de fin de curso que están a punto de celebrar o que ya han realizado.
En el Comité General también se decidió la aportación solidaria de este curso que irá destinada a la Unión Segundas Oportunidades, una asociación de ayuda e inserción a migrantes con sede en Badalona, y que prestó su testimonio en la última Jornada de responsables de ACO. Las comisiones del movimiento, por su parte, presentaron una valoración del curso por escrito.
La zona del Baix Llobregat, dimensión y diversidad
Un espacio relevante del Comité General fue la monografía del Baix Llobregat que explicó su responsable, Francisco Ruiz. Es la mayor zona del movimiento (16 grupos, 124 militantes y 12 consiliarios), donde han militado algunos de los fundadores de ACO (como Lleonard Ramírez) y que ha aportado varios responsables al movimiento. La comarca del Baix Llobregat ocupa el conocido como «cinturón rojo» metropolitano y tiene una larga tradición obrera y sindical.
«La gran diversidad de grupos y de personas, nos aporta una gran riqueza de aprendizajes. Hay mucha gente comprometida en cosas que desconocemos, incluso dos militantes que son ciegas», subrayó Francisco, que valoró que haya un pequeño comité que organiza los encuentros del comité de zona, las diferentes actividades y vela por la vida de los grupos.
«Apasionados por hacer el bien»
El curso 2025-2026 es el último que emana del XII Consejo y, por tanto, recoge los tres objetivos pendientes de cada línea: organizar una acción profética común a todo el movimiento, velar por que los militantes veteranos y jóvenes se acompañen mutuamente y formar a personas que acompañen a la militancia. Recordemos que en primer curso se trabajó la necesidad de vivir en clave de esperanza (curso 2023-2024: «Que la esperanza nos llene de alegría»), a continuación el hecho de ponernos en camino y tratar de hacerlo con los más cercanos (curso actual 2024-2025: «Levántate y camina») y ahora es el momento de apasionarnos para hacer el bien.
El lema del nuevo curso 2025-2026, «Apasionados por hacer el bien», proviene de la carta de san Pablo a Tito y culmina esta secuencia de los tres cursos. «En un mundo en el que crece la desigualdad, la desesperanza, la división y la polarización, donde se niega cualquier valor al otro y se invita a que cada uno se busque la vida, hay un movimiento de repliegue al interior que nos afecta tanto individualmente, como colectivamente y lo vemos en el trabajo, en los barrios, en la Iglesia… Por eso es tan importante esta invitación de san Pablo, que viene de Jesús, ser militantes apasionados por hacer el bien», argumentó el consiliario general Pepe Rodado.
La oración del inicio del Comité General fue preparada por la zona Besòs.
En el descanso, se pudo disfrutar de unas tortillas de calabacín del huerto de Francisco Ruiz.
