«Queremos hacer llegar a las Naciones Unidas nuestra extrema preocupación y nuestra condena ante las graves y crecientes violaciones del derecho humano a la libertad religiosa y de conciencia que tienen lugar en un gran número de Estados miembros.» De este modo se 'expresaban las entidades convocantes —Acción los cristianos para la Abolición de la Tortura, Centro Ecuménico de Cataluña, Justicia y Paz Barcelona y Movimiento de Profesionales Católicos— en un acto de reconocimiento a los cristianos perseguidos por razón de su fe, que se hizo en el Arco de Triunfo de Barcelona el 19 de enero pasado.
En el acto se puso de manifiesto como cientos de millones de personas cristianas sufren persecuciones, discriminaciones, torturas y asesinatos en todo el mundo, tal y como reflejan los datos publicados anualmente por la ONG Open Doors. «Los gobiernos de los países donde se han producido y se producen cada día tales acciones son responsables, sea por acción directa a través de sus decisiones, legislaciones y políticas o por omisión de su deber de protección de los derechos humanos», acusan en el manifiesto.
Además, las entidades han recordado que estas discriminaciones también se extienden a personas de otras confesiones. Por este motivo, han pedido la reacción urgente por parte de la comunidad internacional: «Este manifiesto quiere suscitar en el seno de las Naciones Unidas una repulsa pública y en consecuencia promover una reacción de la Comunidad internacional sobre esta grave situación, a fin de que se impulsen urgentemente los mecanismos y las medidas pertinentes para detener y prevenir estos abominables intentos de exterminio, las agresiones y las discriminaciones.»
Os adjuntamos una recopilación de persecuciones en varios países (en catalán) que se leyó al inicio del acto.