La vulnerabilidad entre las personas migradas y refugiadas se ha visto acentuada por la situación creada por la pandemia. Así, desde el Consejo de Inmigración de Barcelona han elaborado un comunicado en que se hacen una serie de demandas a las diversas administraciones del Estado, unas demandas muy básicas y concretas de dignidad que facilitarían poder aliviar las consecuencias del Covid-19.
ACO nos hemos adherido como movimiento. Puedes consultar el comunicado en el enlace.
Una reflexión interesante en torno a los derechos y los espacios fronterizos en este contexto la ha publicado el compañero Josetxo Ordóñez en el blog de Cristianismo y Justicia. «La construcción jurídica y política de la hospitalidad dependerá de que las personas migrantes y refugiadas sean reconocidas como sujetos políticos, como interlocutores, como seres dignos de tomar la palabra política e influir en la regulación legal», afirma entre otras cosas. Puedes leerlo en el enlace.
