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La reflexión sobre la actual configuración del trabajo marcó las XXII Jornadas Generales de Pastoral Obrera que este año se han hecho en Ávila los días 19 y 20 de noviembre. El eje fueron las aportaciones hechas por el profesor Pedro José Gómez Serrano que apuntó que hay que "pasar de objetos a sujetos del trabajo" y que conviene, en el contexto actual, "trabajar menos y repartir más". En las Jornadas se ha presentado una propuesta de formación para los equipos de Pastoral Obrera y se ha presentado la iniciativa Iglesia unida por un trabajo decente.

"La economía y la política, no están al servicio de las personas, y necesitamos una economía y una política profundamente humanas y humanizadoras. Reclamarlas, y trabajar para que vayan siendo posibles, son exigencias de las implicaciones políticas de nuestra fe cristiana", se afirma en el comunicado emitido y que se puede leer en el enlace.

Os adjuntamos las impresiones del presidente de ACO, Jesús Jiménez y a continuación la crónica de Jordi Cordero:

(Crónica de Jordi Cordero) Creo que fue bien el Encuentro de la P.O.E. en Ávila en torno al tema del "Trabajo decente". La ponencia del sábado por la mañana fue muy interesante, muy clara, muy profética: hay que reducir los horarios de trabajo para redistribuir el trabajo y que todos puedan trabajar, hace falta estabilidad laboral para que las personas puedan tener proyecto de vida y se puedan desarrollar, trabajo no es sólo salario sino que es clave en la dignidad y en la vertebración de la persona...

Los trabajos rutinarios, inconexos, alienantes... desaniman y empobrecen a la persona. No todo el mundo tiene porque trabajar igual, cada uno es digno si trabaja en la medida de sus "talentos".

Ha habido bastante repercusión de los comunicados de la Iglesia sobre el trabajo decente. HOAC, Cáritas... los han difundido por todo el Estado junto con los obispados para "dar una voz única y consensuada de Iglesia en torno al Trabajo Decente".

Se quiere hacer un curso de formación en Pastoral Obrera, como herramienta para que las diócesis tengan personas formadas para, a la vez, formar/sensibilizar a otras personas de la diócesis. Es un curso que se hace en modalidad telemática (on line). Alguien proponía que la diócesis "subvencione" esta formación a alguna persona y que ella pueda luego formar a todos.

También se presentaron y nos dieron unas fichas muy didácticas para que podamos ir trabajando la Pastoral Obrera de forma educativa en reuniones de ACO, JOC, equipos de Pastoral Obrera...

El objetivo de la Iglesia debe ser "producir gente diferente". El triunfo de Trump es el triunfo del egoísmo, del "descarte" de muchos para el enriquecimiento de unos pocos. El verdadero problema no es Trump, sino que 60 millones de personas piensen como él. ¡Por eso la Iglesia tiene que educar a las personas en el Amor de Dios!

Se alertó que la creciente "robotización" está eliminando puestos de trabajo a gran velocidad. ¿Habrá que hacer pagar impuestos a los robots para atender la asistencia a las personas, o seguiremos "descartando personas"?