«El cielo son los otros.» Esta reflexión del responsable de la diócesis de Córdoba, Luisfer Jiménez, en el momento de la oración que abría el Comité General que se hizo el sábado pasado, día 19 de enero, planeó en un encuentro que se prolongó durante todo el día. En el Comité General, que se celebra una vez al año y con la presencia de todos los responsables de zona, de comisiones y el Comité Permanente, se pudo constatar el esfuerzo de la militancia para mantener los diferentes compromisos en los espacios diversos donde se participa para construir un mundo más justo y hacer realidad el Reino.
De entrada, cada responsable de zona hizo un repaso por lo que ha sido este primer trimestre de curso, refiriéndose a la situación de los grupos de las diócesis y a los objetivos y principales retos para este curso. Las zonas explicaron que la iniciación está siendo el hilo conductor, tal y como se propone en el Plan de curso, y también se detallaron otras acciones como la coordinación con otros movimientos, con las delegaciones de Pastoral Obrera, la participación en diversas acciones formativas (por ejemplo, algunos compañeros de la diócesis de Orihuela-Alicante están haciendo un curso sobre Doctrina Social de la Iglesia), la apertura del movimiento a otras personas simpatizantes...
Igualmente y ante la situación sociopolítica en España (políticas neoliberales, nuevos populismos, procés en Cataluña...) se consideró oportuno crear un grupo de trabajo, que sea lo más transversal posible, a fin de elaborar una propuesta de documento de posicionamiento del movimiento, haciendo una lectura de la situación iluminada por el Evangelio y desde los planteamientos de los trabajadores. Desde las diferentes zonas se propondrán los miembros de este grupo que, de cara a final de curso, debería haber podido finalizar esta tarea.
A continuación, las comisiones hicieron varias aportaciones:
En el encuentro también se valoró muy positivamente el Intercambio que se hizo en Pozuelo de Alarcón, aunque habrá que sopesar cambios en cuanto a formato y fechas de cara a incrementar la participación de la militancia. Finalmente, se decidió entre cuatro proyectos propuestos la aportación solidaria a ACO, y se acordó destinar 1.000 euros a distribuir en partes iguales entre el Centro de Promoción Social Francesc Palau (atención sociolaboral a personas inmigradas, El Prat) y la Fundación CEL (trabajo socioeducativo con niños y adolescentes en situación de vulnerabilidad, Arciprestazgo de Sant Andreu, Barcelona).
Por la tarde, una parte del Comité General participó en la Vigilia de Oración que convocaba Migra Studium y a la que ACO se había adherido, ante el CIE (Centro de Internamiento de Extranjeros) de la Zona Franca. Al día siguiente fue la coordinación de las diócesis de Córdoba y Madrid (de Alicante no pudo venir nadie al Comité General) y un encuentro con buena parte de la Comisión de iniciación.