«Deseamos compartir la vida obrera y compartir así nuestra solidaridad con las clases explotadas de la sociedad. En el espíritu de la Encarnación hacemos a la Iglesia presente en el mundo obrero... Ser sacerdote no es un problema para ellos desde el momento en que cumplimos nuestra tarea honestamente con espíritu de solidaridad.» Este es uno de los testimonios de curas obreros que se presentaron en el 35º encuentro de curas obreros de Europa que se celebró en Herzogenrath (Alemania) del 7 al 10 de junio pasados.