El Primero de Mayo es una jornada reivindicativa en la que conmemoramos la solidaridad de los obreros de Chicago de 1886 y las víctimas de la defensa de los derechos laborales. Hoy, vemos nuevas víctimas de la desigualdad, de la explotación y del desempleo en el mundo del trabajo. Como trabajadoras y trabajadores cristianos, queremos manifestar públicamente estas reflexiones:.